Con la mente en el río y la vista en el torno repaso los errores y derivas
de las últimas jornadas.
Los nuevos materiales mejoran el comportamiento
de las moscas. Menor retención de agua, cuerpos más placados, siluetas más
realistas y movimientos más naturales que relajan la dictadura de los colores.
Tras esta borrasca se abre una ventana de buen tiempo, la ocasión perfecta para nuevas propuestas.
Que ganas de poder probar la caja entera, hay que tener paciencia...
ResponderEliminarPues si que hay ganas! aunque por llena que lleves la caja, cuando llegas al río siempre te parecen pocas moscas, je,je! Un saludo Mario.
ResponderEliminar