Avanzar despacio entre la vegetación, asomar la nariz en la orilla y descubrir una trucha comiendo. Esconderse, preparar el señuelo y calcular la mejor estrategia para la emboscada.
Es la pesca que más me gusta y la que más echo de menos durante el invierno. Con videos como este se dispara la imaginación... ya queda menos!
Bonito vídeo. Si que da nostalgias, pero ya os queda menos. Enhorabuena
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